Temiendo que algún rayo de sol se pose en mi cuerpo paso casi todos los veranos en Buenos Aires; calurosa por demás, disfruto de sus calles casi desiertas, abandonadas por los entusiastas veraneantes que se van en busca de tierras más frescas y playas para los mas afortunados.
Parece que todos quieren su museo ahora. Una de las estrategias que están eligiendo últimamente las casas de moda y los diseñadores más importantes es abrir museos o archivos en donde puedan ofrecer un recorrido por sus principales creaciones al tiempo que intentan dotar de más prestigio a las marcas que representan. Pero ¿qué pasa cuando la obra del diseñador o de la marca en cuestión tiene un volumen tal que precisa de aproximadamente 107.500 m2 para su exhibición?
Todo fashionista que se precie de tal alguna vez vio los diseños textiles de Emilio Pucci y quiso morir inmediatamente con una sonrisa de placer dibujada en su rostro. Mercure Galant quiere hoy dedicarle unos minutos a la genial figura de Emilio Pucci, Marqués de Barsento, pieza esencial de la moda desde los cincuenta hasta los setenta sobre todo… Pucci logró que sus estampados gráficos fueran reconocidos en el mundo entero y que se transformaran en un clásico y en piezas de coleccionista.
Hoy me puse un poco histórico. Se me dio por recordar a una de las más prestigiosas publicaciones de moda: HARPER’S BAZAAR. Esto a raíz de la lectura del último número de la versión argentina que ya superó el medio año y se encuentra ahora en su séptimo número. HARPER’S BAZAAR Argentina está dirigida por la encantadora Ana Torrejón cuyas facetas más conocidas para mi eran las relacionadas con el arte puesto que, además, Ana está vinculada a una importante galería de arte argentino y latinoamericano de la que otro día les hablaré mis amigos.
Cada vez más marcas de moda inauguran sus propios museos. Hace unos meses fue el turno de Gucci. El resurgimiento que tuvo la marca durante los años noventa luego del ingreso de Tom Ford en 1990 como director creativo justifica que este año, en su 90 aniversario hagan una mirada retrospectiva y pongan en valor la producción de casi un siglo. La marca comenzó como un emprendimiento de Guccio Gucci que tomó forma en tiendas que vendían productos de cuero a partir de 1921. De hecho Guccio ya había abierto una talabartería en 1906.
Cuenta la leyenda de Halloween que todos los 31 de octubre las almas que andan penando por el inframundo visitan a sus familiares y todo se tiñe de naranja y negro para ahuyentar a los malos espíritus. Por suerte no soy muy supersticiosa pero ese mismo día llegó a mis manos el lookbook primavera verano 2012 de Carolina Müller ¡y que sorpresa me llevé! El precioso mini objeto de deseo es de un naranja furioso; esto sí que es una señal pensé.
Hace unos días atrás, apenas una jornada después del cierre de la Semana de la Moda Masculina de Milán, la pasarela de hombre de París abría sus puertas: una sincronización propia de un reloj suizo, que se ha puesto también de manifiesto a la hora de unificar tendencias, y presentar sus mejores apuestas en prendas de hombre de cara a la primavera-verano de 2012.
Para mitigar un día frio de la semana pasada en que no sabía si iba a llover o venía el fin del mundo decidí refugiarme en Casa FOA; un poco alejada de mi ruta habitual me encontré en la zona sur de la Capital con una grata sorpresa.
En la Fundación Mapfre de Madrid se inauguró este 4 de octubre pasado una nueva exposición dedicada a la obra inagotable del genial Yves Saint-Laurent. Ya saben que para Mercure Galant hay faros que guían a la moda y el querido Yves fue uno de los más importantes que tuvo el siglo XX. Nunca serán suficientes las lecturas y los repasos que puedan hacerse sobre el fruto de su genio creativo y es por eso que me pone súper contento saber que se lo homenajea nuevamente.
Paseando por la noche porteña tuve el gusto de participar de la inauguración de la primera Boutique CHANEL de Argentina ubicada en las coquetas Galerías Pacífico. El clima del jueves a la noche fue perfecto para vestir como indicaba el dress code, y la entrada del Shopping de la calle Florida se vistió de negro, taupe, dorado y la infaltable camelia blanca.