Debido a diferencias momentáneamente irreconciliables con Her Highness Elizabeth II (o “Lilybeth” como suelo llamarla en la intimidad) decidí no asistir a la boda del príncipe William con Catherine Middleton (no le digan “Kate” con esa familiaridad norteamericana de tan mal gusto). Así lo leen. Me quedaré en casa en el hemisferio Sur y me despertaré a las 5 de la mañana para ver desde la comodidad de mi hogar cómo se comporta esta gente en mi ausencia y sobre todo para ver si definitivamente con esta chica Catherine tendremos a una nueva guía del buen gusto en el vestir o no. Entonces hasta este viernes lo único que podré hacer son sólo conjeturas y creo muy necesario hacer un repaso por algunos de los vestidos de novia utilizados en los últimos tiempos en las respectivas ceremonias reales.
El príncipe Carlos y la princesa Diana se casaron en una lujosa ceremonia en el Palacio de Buckingham que fue ampliamente difundida en todo el mundo. Más de 750 millones de personas vieron en sus televisores cómo Lady Di caminó por el pasillo en su opulento vestido de tafetán de seda color marfil y encaje. El vestido diseñado por Elizabeth y David Emanuel fue llamado con acierto, "el vestido más famoso del mundo." Y aunque ahora nos parezca un merengue, no deja de ser el gran ejemplo de vestido de novia Real y ese día Diana vio hermosa saliendo del carruaje para entrar a la St. Paul’s Cathedral. Medio mundo se quedó sin aliento con este vestido compuesto por seis diferentes tejidos - incluyendo 25 metros de tafetán de seda, 100 metros de crinolina de tul y 150 metros de red para el velo. Tal vez lo más memorable fue la cola del vestido bordada a mano y de 7 metros y medio.
Desde que se anunció la boda entre Catherine y William mucha gente sin talento ha estado haciendo comparaciones entre la Middleton y Diana en cuanto a la elección del diseñador del vestido y la forma que finalmente tendrá….pero se olvidan que desde aquel día de julio de 1981 a 2011 pasaron exactamente 30 años….
Sarah Ferguson y el Príncipe Andrés. Sarah no es de mi agrado, les aviso desde ya. Se casaron el 23 de julio de 1986. El vestido estaba confeccionado en satén de seda de color marfil y profusamente bordado en plata. La cola le causó algún problema a Sarah, sobre todo al subirse al carruaje junto a su marido después de la ceremonia religiosa. Después, con el tiempo, Sarah tuvo más problemas aún. No los detallaré porque soy un caballero.
Masako y el Príncipe Naruhito se unieron el 9 de junio de 1993. El bellísimo kimono de Masako constaba de 12 capas y pesaba un total de 15 kilos. El de Naruhito no era menos bello y sus tocados eran espléndidos. Esta es una boda a la que me hubiese encantado asistir!!! La pobre Masako renunció a su carrera diplomática y tuvo que estudiar las principales reglas de etiqueta de palacio, además de poesía japonesa waka y caligrafía. después de la ceremonia tradicional, la pareja se vistió con ropas occidentales y recorrió Tokio en un Rolls Royce. El vestido de Masako fue diseñado por Hanae Mori. El collar de diamantes y la tiara que lució la novia fueron regalos de la emperatriz. Qué buena la suegra..!
Rania Al Yassin y Abdalá de Jordania. La bella Rania se casó el 10 de junio de 1993 y lució un diseño con chaqueta de manga corta bordada en oro. El maquillaje, recargado e intenso, y las facciones de su rostro, aún sin pulir, no hacían sospechar que la princesa se convertiría en el icono de estilo que hoy es. Yo ni me enteré casi de la boda. Sólo unas amistades me comentaron algunos chismes. Rania hoy es una mujer espectacular y todos estamos ansiosos por verla en lo de Catherine y William este viernes!!
Elena de Borbón y Jaime de Marichalar. Seré escueto y trataré de no ventilar los secretos Reales que conozco sobre este desafortunado enlace que no hace mucho se deshizo. Se casaron el 18 de marzo de 1995, y el vestido fue una creación con escote cuadrado del diseñador Petro Valverde. Siguiendo la tradición iniciada por su madre, Elena también llevó el velo de la Reina Federica. Jaime de Marichalar habrá armado el ramo con sus propias manos??? Stop. No hablo más.
Marie Chantal Miller y Pablo de Grecia dieron el sí el 1 de julio de 1995. El vestido de Marie Chantal era una espectacular creación de Valentino de encaje bordado y puntillas. (No hay modistos griegos acaso para hacerle el encargo??) Valentino estaba que trinaba con este vestido y tuvo a su taller saltando durante cuatro meses de plena dedicación para tenerlo listo. La novia tuvo que convertirse a la religión ortodoxa y aprender griego en un tiempo récord (por lo menos aprendió a decir sí, quiero! Nótese la maldad de este último comentario).
Cristina de Borbón e Iñaki Urdangarín unieron sus corazones (qué hermosa frase que escribí) el 4 de octubre de 1997. La infanta llevó un discreto vestido con escote barco de Lorenzo Caprile. El vestido en cuestión la hacía gorda ahora que miro bien las fotos. Nada más que decir salvo destacar la elegancia de Iñaki. (La casa real española no se dedstca por dejarnos boquiabiertos con su elegancia).
Mette Marit Tjessem y el Príncipe Hakoon de Noruega se casaron el 25 de agosto de 2001. El vestido fue confeccionado por el modisto noruego Ove Harder Finseth, y era una soberbia creación de líneas clásicas en crêpe de seda. El traje de la novia estaba cargado de simbolismo, ya que se inspiraba en el que llevó la reina Maud (personaje interesantísimo de quien hablaré en algún post próximamente), bisabuela del novio, el día de su boda. Además, en lugar del tradicional bouquet, Mette Marit escogió una larga guirnalda trenzada de flores. Detalle ultra moderno y extraño. Mette Marit tienes un diez, por la guirnalda y por llevarte a Hakoon.
Máxima Zorreguieta y el Príncipe Guillermo de Holanda se casaron el 2 de febrero de 2002 y el vestido era un diseño de Valentino, con manga larga ajustada y escote tipo Audrey Hepburn. Máxima llevó una maravillosa tiara, la misma que lució la reina Beatriz en su boda con el Príncipe Claus, además de un juego de pendientes y pulsera de diamantes y platino. Máxima es una muchacha argentina aunque tenga prohibido gritar nuestros goles en los partidos de fútbol de Argentina y Holanda. En el fondo de su ser yo se que le sale la cancha y los grita.
Mary Donaldson y Federico de Dinamarca se casaron el 14 de mayo de 2004. La australiana escogió un diseño del modisto danés Uffe Frank con escote redondo y originales mangas que fueron bautizadas por su creador como Cala, por su parecido con la flor del mismo nombre. El velo fue usado por la bisabuela de Federico, la princesa Margret de Suecia, el día de su boda. Mary Donaldson lucía una espectacular tiara, regalo de la reina Margarita, y unos pendientes de platino, diamantes y perlas de los Mares del Sur, que fueron creados de forma artesanal y en exclusiva para la ocasión por la diseñadora de joyas Marianne Dulong. Federico parecía un soldadito de plomo. Muy prolijito y correcto en traje militar de gala.
Letizia Ortiz y el Príncipe Felipe. Venga!!! Nuestros españolitos contrajeron matrimonio el 22 de mayo de 2004. La periodista devenida princesa lució una creación de corte princesa de Manuel Pertegaz con escote corola bordado de plata. La imprevista lluvia obligó a la novia a llegar a la catedral de La Almudena en un Rolls Royce en lugar de a pie, tal y como estaba previsto. Letizia llevó un manto nupcial de tul de seda natural de tres metros de largo con bordados que mezclan la flor de lis y la espiga. En cuanto a las joyas, la novia lució unos pendientes de platino con diez diamantes, regalo de los Reyes, y misma diadema de platino y brillantes con motivos helénicos que Doña Sofía lució el día de su boda. Letizia se robó la ilusión de muchas hispanoparlantes que tenían esperanzas aún de que el apuesto príncipe les prestara atención.
Una de las bodas reales más lujosas de los últimos tiempos fue la de la princesa Victoria de Suecia el 19 de junio de 2010. La muchacha se casó con su ex personal trainer y exitosísimo empresario del fitness Daniel Westling. Eligió un vestido del diseñador sueco Par Engshed con una cola larguísima que necesitó de la ayuda de dos equipos de damas de honor que fueran acomodándola por la nave de la iglesia cuando la novia hizo su recorrido hacia el altar. El modelo fue confeccionado con seda duquesa satinada en color crema, con manga corta y cuello hacia el exterior siguiendo la línea del cuello, lo que daba la impresión de un escote barco. La cintura estaba muy marcada por un fajín abotonado en la parte posterior. La parte posterior tenía forma de V, también con botones forrados. La cola del vestido, de cinco metros de longitud, estaba ribeteada, sujetada a la cintura y cubierta con el velo dispuesto en la misma forma. El vestido fue de un diseño discreto y muy lineal pero efectivo y elegante. El detalle más impresionante fue la famosa tiara de camafeos romanos, regalo de Napoleón Bonaparte a Josefina y que la madre de Victoria ya había utilizado en su boda treinta años antes.
Tatiana Blatnik y Nicolás de Grecia se unieron el 25 de agosto de 2010. Tatiana eligió un diseño de inspiración clásica de encaje y escote palabra de honor firmado por el diseñador Ángel Sánchez. La novia llegó a la iglesia muy divertida y sonriente en calesa porque la isla griega de Spetses, donde se celebró la boda, es tan pequeña que los coches están prohibidos. Qué monada no???!!!